Reseña:
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El hambre y sed de justicia, una constante en la historia de la humanidad, es un dato revelador de su ausencia y de su requerimiento, que se plasma en un anhelo, en un propósito, aunque muchas veces no en la realidad fáctica: iustitia est constans ac perpetua voluntas ius suum cuique tribuendi. Pues bien, tanto la mediación como el saneamiento están orientados a lograr que esa voluntas tribuendi se torne en un real y concreto tríbuere. |