Reseña:
|
La coexistencia de tribunales y de mecanismos de solución de controversias no es un fenómeno nuevo y parece generar riesgos para la coherencia y la unidad del orden internacional. Nos encontramos ante un mapa judicial y cuasi-judicial en el que coexisten múltiples regímenes de normas de interpretación y de aplicación. Pero la falta de un sistema unitario no implica que cada tribunal responda a un ordenamiento jurídico autónomo. Así, se está desarrollando una creciente cooperación judicial entre órganos como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la Organización de Estados Americanos, la Audiencia Nacional en España, la Corte Interamericana, la Corte centroamericana de Justicia, el sistema de arbitraje del MERCOSUR, etc. Por ello, veremos cómo la Comisión de Derecho Internacional está desarrollando trabajos sobre dicha fragmentación judicial. |